Iglesias Cristianas de Dios
[CB28]
El Ejército Angelical
(Edición 1.0
15072006-15072006)
El Único Dios Verdadero (Eloah) se
convirtió en Padre cuando creó a sus hijos espirituales. En este papel
echaremos un vistazo breve a los rangos y funciones de la creación espiritual.
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(Derechos reservados © 2006 Christian Churches of God, ed. Wade Cox)
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El Ejército Angelical
La Biblia
enseña que el Único Dios Verdadero es invisible, y nadie nunca le ha visto o
escuchado su voz en ningún momento (Jn. 1:18; 5:37). Dios (Eloah) tiene vida en
Sí Mismo así que él no necesita venir a la existencia (Jn. 5:25; 1 Ti. 6:16).
Él siempre existió y siempre existirá. En algún punto Dios estaba solo pero
decidió crear una familia por su cuenta. Vea el papel ¿Quien es Dios? (No.CB1)
La primera
emanación, o lo que primero salió de Dios, fue el Espíritu Santo. Ésta fue la
manera por la cual la subsiguiente creación pudo estar atada a Dios. De allí
Dios generó (o creo) a los Hijos Espirituales y a través del Espíritu Santo
fueron unidos a Dios y pudieron actuar según Su voluntad. Fue entonces que Dios
se convirtió en el Padre de los Espíritus (Heb. 12:9). Vea el papel ¿Quién es el Espíritu Santo? (No.CB3)
Estos Hijos del
Dios Altísimo son todos Elohim o todos dioses (de Sal. 82:1) en varios grados.
Fueron creados perfectos, y con tal de que permanecieran obedientes a Eloah
vivirían por siempre como hijos espirituales de Dios.
¿Quién o qué
son los ángeles?
Los ángeles son
mensajeros de Dios que llevan a cabo Su trabajo. Los hijos espirituales de Dios
no fueron llamados ángeles hasta después de la creación de Adán. Hasta el
momento que alguien existió para recibir un mensaje, no había necesidad de un
mensajero.
Los ángeles son
seres de espíritu (Heb. 1:14). Dios creó a Sus hijos espirituales antes de
crear la tierra (Job 38:4-7). Hay posiblemente alrededor de 100 millones de
ángeles (vea Dn. 7:9-10; Mt. 26:53; Lc. 2:13; Heb. 12:22; Ap. 5:11). Los
ángeles son individuos que tienen libertad de elección, lo cual es requerido
para el desarrollo del carácter.
El término
hebreo para mensajero en el antiguo testamento es mal'ak y es
traducido como ángel en nuestras Biblias latinas. El término se usa para
referirse a los mensajeros espirituales enviados por Dios (Gn. 32:1-2) y fue
también usado para referirse a los mensajeros humanos enviados por Jacob
(Gen.32:3).
En el Nuevo
Testamento, la palabra griega para mensajero es aggelos, de la
cuál obtenemos la palabra latina ángel. Esta palabra es también usada
tanto en mensajeros humanos y espirituales.
Dios envió
diversos tipos de mensajeros. En primer lugar, había mensajeros humanos
proféticos (2 Cr. 36:15-16). En segundo lugar, había también mensajeros
espirituales enviados a humanos con una función o mensaje en particular.
Como agentes de
Dios, son enviados a la tierra para llevar las decisiones de Dios en materia de
castigo y corrección de los humanos (Ex. 12:23; Sal. 104:4; 2 S. 24:16; 2 R.
19:35; 1 Cr. 21:16; Hch 12:23; Heb. 11:28; 1 Co. 10:10).
Los ángeles
también llevan mensajes a los profetas de Dios y protegen al pueblo de Dios
(Sal. 34:7; 91:11; Dn. 6:22; Mt. 18:10; Heb. 1:14). Cuando los ángeles
aparecían ante la humanidad estaban siempre en forma humana (Gn. 18:2; 19:1,
10; Lc. 24:4; Hch 1:10).
Los hijos
espirituales de Dios son también tratados como seres en diferentes rangos y
poder (Zac. 1:9, 11; Dn. 10:13; 12:1; Ef. 1:21; Col 1:16; 1 Ts. 4:16; Judas
1:9). Son “poderosos” (2 Ts. 1:7); llamados “poderosos” (Sal. 103:20); “Santos”
(Lc. 9:26); “Escogidos” (1 Ti. 5:21). Sin embargo, no deben ser adorados (Col
2:18; Ap. 19:10).
Algunos ángeles
tienen alas y algunos son retratados como teniendo múltiples caras, incluidas
las caras de animales (Ez. 1:4-14; Is. 6:1-3). Pueden cambiar su apariencia y
pueden parecerse a los humanos comunes cuando aparecen ante los hombres (Heb.
13:2). Muchas veces tienen una claridad alrededor de ellos y traen puestas
brillantes ropas blancas (Hch 1:9-11; 22:6-9; 2 S. 22:13).
Los seres
humanos no tienen permiso de ver a Dios así que los ángeles le ayudan a los humanos
a entender al Único Dios Verdadero, Eloah.
El ángel en el
antiguo testamento
El mensajero
más importante enviado por Dios es el mismo llamado el “ángel del Señor” y el
“ángel de Dios” en nuestras Biblias latinas. Estos títulos se refieren al ángel
especial (o el mensajero) que llevó la autoridad de Dios y representó a
Dios. Él era frecuentemente llamado Yahovah.
Las personas
del antiguo testamento sabían que este mensajero de Dios no era realmente el
Único Dios Verdadero. Sabían que Dios (Eloah) se revelaba a ellos a través de
Su Ángel que también llamaron Elohim. Cuando el ángel de Yahovah estaba
presente con ellos, significaba que Dios (Eloah) estaba presente. El ángel
hablaba y representaba al Único Dios Verdadero.
El ángel de
Yahovah que frecuentemente trataba con humanos era el dios de Israel (es
decir Elohim). Él representaba a Eloah, el Único Dios Verdadero que
Israel adoraba. Él era el ser que más tarde se convirtió en la persona de
Jesucristo. Vea el papel ¿Quien es
Jesús? (No.CB2)
Miremos
algunas de las muchas instancias donde este ángel apareció y habló a los
humanos en la antigüedad.
La Biblia dice
que fue el ángel de Yahovah el que hizo estas cosas (Hch 7:30-38; Gl. 3:19).
El apóstol
Pablo dijo que fue Cristo que condujo a Israel a través del mar (1 Co. 10:1-4).
Pablo también identifica al ángel de Dios como Jesucristo en Galatas 4:14. Vea
el papel El ángel de JHVH (No. 24)
Otros ejemplos
del ángel apareciendo ante humanos:
·
Los
padres de Sanson y el ángel (Jue. 13:2 - 20).
Los ángeles en
el Nuevo Testamento
También vemos a
los ángeles asistiendo a Jesús mientras estaba en la tierra (Mt. 4:11; Lc.
22:43). Un ángel se apareció ante José y anunció el nacimiento de Jesús (Mt.
1:20; Lc. 1:26-38); Los ángeles estaban allí cuando Jesús fue resucitado (Mt.
28:2-7; Jn. 20:10-14) y hablaron de su ascensión (Hch 1:9-11). Los ángeles son
espíritus que ministran al pueblo de Dios (Mt. 18:10; Hch 5:19-20; 8:26; 10:3;
12:7-10; 27:23; Heb. 1:14). Se regocijan cuando un pecador se arrepiente (Lc.
15:10).
En el Nuevo
Testamento, Cristo como un ser humano todavía actuaba como divulgador de la
voluntad Dios y el carácter y la naturaleza de Dios perfectamente reflejadas.
Como el mediador entre Dios y los hombres, ver a Jesús era ver a Dios y oírle
era oír a Dios (Eloah). Las palabras que él hablaba no eran suyas, sino de Dios
(Jn. 14:8-10).
Diferentes
rangos del Ejercito Angelical
Dentro de la
categoría de ángeles hay muchos diferentes géneros, con poderes y funciones
diferentes (Zac. 1:7-11; Dn. 10:13; 12:1; Ef. 1:22; Col 1:16; 1 Ts. 4:16; Judas
1:9).
Tronos,
Dominios, Potestades, Principados
Sabemos que
Cristo fue el primogénito de la creación y mientras él no creaba a los otros
hijos de Dios, el creo (es decir organizo) los tronos, dominios, principados,
autoridades. Éstas son administraciones y no nombres de seres espirituales. En
Cristo todas las cosas son cohesivas (Col. 1:16-17).
Serafines:
Los Serafines
tienen seis alas (vea Is. 6:2,6). Tenían el poder de substraer la culpabilidad
del pecado para preparar a los profetas (Is. 6:7). Las seis alas quizá indican
que son de alto rango y tienen muchas funciones diferentes para realizar.
La palabra Serafín
es el plural de la palabra sârâph (SHD 8314) significando arder.
Porque las serpientes en Números 21:6,8 ardían en el veneno de su
mordida, fueron llamados Serafines. Así, tenemos el concepto de estos
Serafines siendo las “serpientes ardientes de los cielos” (compare también Dt.
8:15; Isa. 14:29; 30:6). Dios los envía a castigar a las personas por el
pecado. Su forma parece ser algo humana en que tienen
cara, manos y pies además de sus alas. Se representan como "estando"
sobre el Rey cuando él se sienta sobre su trono, listos para atenderle.
Estos seres son
los arcángeles y tienen posiciones importantes en el Ejército divino. Los
arcángeles son más a menudo enviados a la tierra para entregar los mensajes de
Dios y advertencias al género humano y a los profetas.
El Libro de
Enoch nombra seis arcángeles: Miguel (el que está a cargo de la mejor parte
de la humanidad), Gabriel (esta a cargo de las serpientes, el Jardín y los
Querubines), Uriel (es el ángel sobre el mundo y el Tártaro) y Rafael (es el
ángel de los espíritus de los hombres), Raguel (quien toma venganza en el mundo
y las luces) y Saraqael (es colocado sobre los espíritus de los hijos de los
hombres, cuyos espíritus han pecado) (El Libro de Enoch, Chapter XX,
R.H. Charles, 2002).
Estos ángeles
son también llamados Observadores.
El arcángel Gabriel:
El arcángel
Miguel:
Miguel, el gran
príncipe, es mencionado un número de veces en el antiguo testamento.
Este Serafín es
identificado como el Querubín alrededor del Trono de Dios como vemos ahora.
Querubines:
El Trono de
Dios está rodeado de cuatro bestias con cabezas diferentes. Estas son de un
león, un toro, un águila y un hombre. Son llamados Querubines
("Querube" singular). Son cuatro en número y tienen seis alas cuando
rodean el Trono de Dios (Ap. 4:6-9). Una descripción de Querubines es dada en
Ezequiel 1:5-14, Ezequiel 10:20-21, y Apocalipsis 4:6-9. Donde son una
estructura compuesta en Ezequiel protegiendo al subordinado Yahovah de Israel,
están enumerados como teniendo cuatro alas en sus torsos superiores. Ninguna
mención es hecha de las dos alas en sus pies que se asocian con los Serafines que rodean el Trono
de Dios (como vimos en Apocalipsis), ni concerniente al Serafín o ardiente del
antiguo testamento. El numero cuatro guarda relación
con la creación material. Cuando estos Querubines son enviados para ocuparse de
la creación física bajo Yahovah de Israel, y actúan en conjunto, son de cuatro
alas y se mueven juntos en un carruaje siempre de cara a la misma dirección.
Los Querubínes rodeando el Trono de Dios son de seis alas como Serafines.
El simbolismo
de las cabezas de las criaturas rodeando el Trono de Dios es identificado como
Querubines en Ezequiel 1:1-28. Vea el papel El Significado de la
Visión de Ezequiel (No. 108)
Las cabezas
animales se refieren a los estándares de batalla de Israel y la división de las
tribus, de Números 10 y 11. Vea el papel La Creación de la Familia de Dios (No.CB4)
Había
originalmente cuatro Querubines, dos querubines cubriendo y dos querubines
levantándose detrás del Trono de Dios. Ezequiel 1:4-14 habla de cuatro, y éste
es el número de los "seres vivientes" mencionados en Apocalipsis 4:6.
Los querubines
son mencionados en Génesis 3:24, donde leemos que Dios desterró al hombre del
Jardín del Edén y colocó Querubines y una espada encendida en el oriente del
Jardín del Edén para cuidar que el hombre no regresara y tomara del árbol de la
vida.
De 2 Samuel
22:11, Salmos 18:10 y Ezequiel capítulos 1, 9 y 10 aparece las cabalgatas
Eternas en cuatro Querubines.
Vemos imágenes
de Querubines siendo usadas en el Tabernáculo y el Templo. Esos en el Arca se
llaman los "querubines de la Gloria" (Heb. 9:5), para que en ellos
descanse la visible gloria de Dios.
Dos Querubines
hechos de oro y de cara unos a otros con las alas extendidas fueron colocados
en el arca de la alianza (Ex. 25:17-20). Dios (a través de Su ángel) prometió
hablar con Moisés "de entre los Querubines" (Ex. 25:22). Imágenes de
Querubines fueron obradas en las cortinas del Tabernáculo (Ex. 26:1,31).
El rey Salomón
tenía dos Querubines hechos de madera de olivo, puestos en el Templo. Los
querubines estaban también esculpidos en las puertas y las paredes del Templo,
e imágenes de Querubines estaban cosidas en un velo de lino usado en el Templo
(1 R. 6:23-35; ref. 2 Cr. capítulo 3).
Si bien la
Biblia nos dice que no hagamos ídolo de ninguna cosa del cielo o la tierra (Ex.
20:4; Dt. 4:16ff.), Los Israelitas fueron instruidos para esculpir Querubines
en las paredes del tabernáculo. Estos eran decorativos y simbólicos, y NO
fueron usados para adorar. El Tabernáculo que Moisés construyo y el Templo que
Salomón construyo eran representaciones físicas (o copias) de lo que está en
cielo.
Luceros de la
Mañana
Lucero de la
mañana, Estrella del Día o Portador de la Luz son rangos y no nombres del
ejercito espiritual (Job 38:1-7).
Los Luceros de
la Mañana parecen tener deberes como los Querubines. El actual Lucero de la
Mañana, Azazel o Lucero, era uno de los querubines protectores ungidos antes de
rebelarse. Este rango y función, que Satanás sostiene como dios de este
planeta, será tomado por Cristo en su segunda venida (vea Ap. 22:16).
Aparte de
Satanás y Cristo hay otros miembros del ejército que comparten este rango y
función. Vea el papel Lucero:
Portador de la Luz y Lucero de la Mañana (No. 223). En la creación del planeta los Luceros de la
Mañana fueron congregados y cantaron juntos y todos los Hijos de Dios gritaron
de alegría (Job 38:7).
¿Creó Dios un
Diablo?
Dios creó a Sus
hijos perfectos, pero tenían libertad de escoger obedecer o desobedecer.
Sabemos que algunos de ellos pecaron y la Biblia se refiere a ellos como
“ángeles caídos” (Gn. 6:2,4; Judas 1:6).
Lucero era un modelo de perfección, lleno de sabiduría y perfecto en belleza,
pero se llenó de orgullo y vanidad. Se llenó de violencia y se torno a la forma
del pecado (Ez. 28:12-17). Él pensó que podía hacer un mejor trabajo que Dios y
trato de tomar el Trono de Dios y gobernar el universo (Is. 14:12-14). Su rebelión
fracasó y fue echado a la tierra (Lc. 10:18; ref. también Ap. 12:7-9). Lucero
persuadió una tercera parte de los ángeles a seguirle en la rebelión. Él es
conocido ahora como Satanás el diablo y los ángeles que le siguieron son
conocidos como demonios. Colectivamente son llamados el “ejercito caído”. Vea el papel ¿Quien es Satanás? (No.CB60)
Algunos de los ángeles
caídos fueron encerrados en una prisión esperando el juicio (1 P. 3:18-20; 2 P. 2:4-5; Judas 1:6). Los otros del ejercito caído todavía vagan
libremente alrededor de la tierra (Job 1:6-12; Lc. 8:30-32).
¿Qué les
ocurrirá a Satanás y los demonios?
Cristo calificó
para redimir tanto a la humanidad y el ejército caído. Él pagó las consecuencias
por todo nuestros pecados (Col. 1:19). Es la voluntad de Dios que ninguna carne
perezca, pero todos deben venir al arrepentimiento (2 P. 3:9).
Así parece que
los demonios serán juzgados en la Segunda Resurrección de los muertos cuando
tomen forma física de igual manera que los humanos resucitados. Todos ellos
tendrán oportunidad de arrepentirse y ser transformados en hijos espirituales
de Dios. Lea lo que la Biblia dice en Isaías 14:11-17. Vemos que Satanás es
mencionado como un hombre y en el abismo en el versículo 15. Sabemos que
Cristo, como un antiguo ser espiritual, se convirtió en un hombre y murió una
muerte física. Por consiguiente, lo mismo debe ser posible para Satanás y los
demonios. Sin embargo, hay siempre una consecuencia por el pecado y Satanás y
los demonios no pasarán sin un castigo. En primer lugar, no reasumirán las
posiciones que tenían antes de la rebelión.
El destino de
los humanos
Dios es
espíritu y lo que es nacido de Espíritu es espíritu, así que la primera fase de
la creación de Dios fue de seres espirituales (Jn. 3:6). El primer hombre Adán
fue también creado por Dios, pero de materia, es decir del polvo de la tierra,
así que él fue creado un ser físico. Él se llama también 'un hijo de Dios' (Lc.
3:38). Los seres físicos (el género humano) fueron la segunda fase de la
creación de Dios.
Lo que nace de
carne es carne (Jn. 3:6), y la carne y la sangre no pueden entrar en el Reino
de Dios. (1 Co. 15:50). Pero el destino de los humanos es convertirse en '
hijos de Dios ', o sea en seres espirituales. Quienes conocen al Único Dios
Verdadero y a Jesucristo, el hijo que él envió, y se arrepienten y son
bautizados y reciben el regalo del Espíritu de Dios, tienen el derecho de
convertirse en hijos de Dios (Jn. 1:12-13; Ro. 8:14-15; 1 Jn. 3:1).
Aquellos en la
Primera Resurrección se convertirán en seres espirituales y gobernaran como
coherederos con Cristo durante los mil años del Milenio. Aquellos en la Segunda
Resurrección, que es una resurrección de corrección y juicio, también se convertirán
en seres espirituales cuando califiquen para lograr ese estatus.
El plan de Dios
para Su familia no estará completo hasta después del juicio final y la
conversión del planeta entero. Todo el planeta entonces será hijos de Dios como
elohim. A través del Espíritu Santo seremos uno con Dios como la familia de
Dios.
Para más
información y más estudio vea los papeles:
Cómo Dios llego a ser una
Familia (No. 187)
El Juicio de los Demonios (No.
80)
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